Clorador Flotante: mantiene tu piscina limpia sin esfuerzo

Si tienes piscina (o sueñas con tener una), seguro sabes que el agua cristalina y segura no se logra solo “echando cloro”.
Aquí es donde entra el verdadero héroe silencioso: el Clorador Flotante.

Pequeño, económico y sorprendentemente efectivo, el Clorador Flotante es la clave para mantener el agua siempre lista para nadar sin complicarte la vida.
¿Quieres saber por qué? Sigue leyendo.


¿Qué es un Clorador Flotante y cómo funciona?

Un Clorador Flotante es un dosificador de plástico diseñado para contener tabletas de cloro o bromo.
Flota suavemente sobre el agua y libera el producto químico de forma gradual, manteniendo el nivel de desinfección de la piscina constante y evitando que tengas que añadir cloro cada día.

Lo mejor: funciona solo, sin electricidad ni instalaciones complicadas. Solo llenas el depósito, ajustas la apertura de las rejillas y lo dejas hacer su trabajo.


Ventajas de usar un Clorador Flotante

  • Desinfección continua y uniforme: evita picos y caídas en el nivel de cloro.
  • Ahorro de tiempo y esfuerzo: olvídate de disolver cloro manualmente cada día.
  • Protección del agua frente a bacterias y algas.
  • Más seguridad: evita el contacto directo con el cloro.
  • Ideal para piscinas pequeñas, medianas o desmontables.

Además, son económicos y duran años con buen cuidado.


¿Cómo usar correctamente un Clorador Flotante?

  1. Elige tabletas adecuadas: normalmente de cloro estabilizado (tricloro) de 3” o 1”.
  2. Coloca las tabletas dentro del Clorador Flotante.
  3. Ajusta la apertura de las rejillas según el tamaño de tu piscina y la cantidad de cloro que necesitas liberar.
  4. Deja que flote libremente mientras la piscina está en uso o en reposo.
  5. Revisa semanalmente que quede suficiente producto y rellena cuando sea necesario.

Consejo extra: retíralo del agua durante el baño si quieres evitar que choque con los bañistas.


Errores comunes que debes evitar

  • Usar el Clorador Flotante solo como única fuente de cloro (en piscinas grandes puede no ser suficiente).
  • Colocar tabletas directamente en los skimmers o en el fondo (pueden manchar o dañar el revestimiento).
  • No medir el cloro residual: aunque el Clorador Flotante libera cloro, siempre debes comprobar los niveles (1–3 ppm es lo ideal).

¿Es mejor que un clorador automático?

El Clorador Flotante es perfecto para quienes buscan simplicidad y bajo costo.
Para piscinas grandes, de uso intensivo o comunitarias, un clorador automático conectado al sistema de filtración puede ser más adecuado porque permite ajustes más finos.

Pero para la mayoría de las piscinas domésticas, el Clorador Flotante es suficiente para disfrutar de agua limpia todo el verano.


Conclusión: pequeño pero poderoso

Un simple Clorador Flotante puede cambiar por completo el mantenimiento de tu piscina:
✔ Menos complicaciones, ✔ agua siempre desinfectada, ✔ menos riesgo de errores.

Si quieres olvidarte de añadir cloro todos los días, sin gastar mucho ni complicarte, el Clorador Flotante es, sin duda, tu mejor aliado.